lunes, 9 de diciembre de 2013

Una sociedad basada en la Etica

¿Como sería una sociedad basada en la ética??

¿Cual sociedad?, ¿la actual?, ¿una sociedad imaginaria que se pudo haber creado?, ¿o una sociedad posterior a la actual que debamos crear?,

¿Qué ética?, ¿la ética actual?, ¿La ética de un sistema basado en la falta “de”?

¿Una ética juzgada a medias?, ¿una sociedad que juzga la ética de sus individuos pero se pasa por alto la ética de lo que lo construyo?

¿Es ético el estilo de vida que llevamos?,.. El estilo de vida impuesto por el sistema

No robes cosas que por principio alguien ya robó,

No mates, aunque a diario mueran personas como consecuencia de un sistema basado en la desigualdad y en la explotación, un sistema sin ética que nadie juzga porque nadie cree que haya sido construido así.

La desigualdad es consecuencia de la falta de ética, se afirma categóricamente, nadie cuestiona si la falta de ética y la desigualdad son consecuencia del sistema, la palabra “sistema” en sí, le causa escozor a mucha gente, la palabra “sistema” es sinónimo de “conspiración”, o más bien de “conspiranoico”.

¿El sistema capitalista es ético?,. ¿el sistema social preponderante es ético?.

El arte del “buen vivir” personal que no cuestiona si lesiona el “buen vivir” colectivo, que no cuestiona si como consecuencia de mi “buen vivir” asociado al sistema económico y a la depredación derivada “de”, se crean muchos “mal vivir”.

¿Mi “buen vivir” egoísta es Ético?,.. Aunque lo consiga de manera “ética”, porque, ¿que es mas ético que lo legal?

¿Lo legal es ético?

¿Cuántas leyes legitiman causas poco éticas?

¿Cuántas leyes “regulan” y legitiman comportamientos poco éticos?

¿La ética social está por encima de la ética natural?

Filosofar sin observar, “cuestionar” sin cuestionar, decidir sin profundizar, decidir sin, de verdad, analizar.

Tomar mis decisiones sin evaluar un contexto, tomar mis decisiones pensando solo en mi, creyendo, según, pensando, que los demás no tienen buenas consecuencias, porque no piensan como yo.

La culpa es de los individuos poco pensantes y poco éticos, la culpa nunca será de un sistema sobre pensado y corrompido en extremo.

Una ética idealizada consecuencia de una educación y una cultura también idealizadas, aunque claramente en el diseño del sistema una sociedad educada y culta no era necesaria, ni siquiera era deseable.

¿Este sistema existiría en el contexto de una sociedad basada en la ética?

¿Las personas están listas o son capaces de cuestionar una ética diferente a la que le fue puesta sobre los ojos?

¿La ética a la que todo el mundo se refiere es una ética universal y atemporal o es una ética que solo funciona en el actual sistema y en el tiempo presente?

¿El mundo que creamos y la ética existente entonces es el mundo ideal basado en la ética ideal?

¿No había otro camino?, ¿no era posible otro presente?, y por ende, ¿no había otra ética posible?

¿El presente es la consecuencia de nuestras buenas decisiones como civilización o estamos parados en el pantano lodoso al que nos trajeron nuestras malas decisiones?

Según yo, estamos atascados en un lodazal compuesto de cientos de años de malas decisiones, malas decisiones que construyeron una sociedad en descomposición, una civilización muy poco civilizada y una serie de valores y virtudes inalcanzables puestos sobre nuestros ojos como alcanzables únicamente para, en el mejor de los casos, regalarnos un poco de esperanza, pero, en el peor de los casos, para clasificar a los individuos en “culpables” e “inocentes”, porque, alguien tiene que tener la culpa, ¿la culpa de que?, de “lo que ocurre”, aunque, “lo que ocurre” haya sido diseñado así desde el inicio.

sábado, 21 de septiembre de 2013

Loquemeimagino Podcast N° 19, Algo sobre la Reforma Energetica.

Buenos días (al menos al momento de escribir estas líneas),. Este es el capitulo N° 19 de nuestro podcast, en el tratamos un asunto que, tomando en cuenta que el sistema económico en el que vivimos está basado en la energía derivada de la extracción del petróleo y ante su próxima escases nos pareció importante,.. Unas letras NO tan chiquitas en la Reforma Energética de México, de las que nadie parece preocuparse.

Se nos va la vida “defendiendo” un recurso altamente contaminante y ahora, parece ser, hasta escaso y dejamos de lado otras formas de generar energía, que en un futuro serán vitales para la subsistencia tanto económica como social de las naciones.
En fin, otra vez, solo un mal viajé , como siempre la música salva el podcast, espero que al menos eso les guste,.

Escúchelo, descárguelo o haga lo que quiera con el,... por mi parte, ¡¡¡ MIL GRACIAS !!! por seguir escuchando..

Escuchalo o bájalo desde aquí:...



Les dejo también el link hacia la propuesta de Reforma Energetica presentada por el Gobierno Federal para que puedan leerla con mas calma,... Reforma Energetica

miércoles, 14 de agosto de 2013

Hitler ganó la guerra

Buscando, buscando como siempre, me encontré con este libro, un libro que al contrario de lo que se podría pensar no es un tratado acerca del nazismo, ni una biografía de Adolfo Hitler, ni nada por el estilo, este libro más bien nos da una idea de la manera en que está repartido el poder oligárquico global, nos da antecedentes históricos, sociales y económicos, sobre todo nos ayuda a entender ciertos aspectos de la actual crisis económica global, la cual, según podemos ver es principalmente energética,. En fin,.. Es un gran libro, según YO, es un gran libro que merece leerse y sobre todo analizarse.

Un gran libro, que al tratar temas como; el 11 de septiembre, los grupos Bilderberg, la Comisión Trilateral, la CIA, el FBI, el poder Global, y varios de ese tipo, la gente lo catalogó en su momento como mera teoría de conspiración, aunque al leerlo y sobre todo al compararlo con la realidad que vivimos hoy en día solo nos podemos preguntar ¿Qué tan alejadas de la realidad están las teorías conspirativas?.

les voy a dejar aquí un capitulo que nos hace ver lo acertado que fue este libro, escrito en el 2003 y que hacia predicciones a 10 años, mismas que hoy podemos constatar, se están cumpliendo,.. no son esperanzadoras, no son agradables, pero, parecen ser muy reales, el fragmento es largo, pero, según YO, interesante

No los distraigo mas,.. aquí les dejo el capitulo, les dejaría el link de descarga, pero la neta es un libro muy barato ($120.00 en Gandhi), mejor cómprenlo, vale la pena..


Hitler ganó la guerra.
Walter Graziano
Argentina - 2003


¿Quién no cree, sin casi ningún cuestionamiento el viejo refrán que asevera que "la historia la escriben los vencedores"? Más aún, se suele repetir esa frase una y otra vez. Sin embargo, en pocas ocasiones se tiene una exacta idea de hasta qué niveles de profundidad esto puede llegar a ser verdad. Existe otra frase famosa, que también forma parte del refranero popular. Vale la pena poner ambas en juego dialéctico. Se trata de aquel viejo dicho que asegura que "la realidad supera a la ficción". Si estamos de acuerdo en que ambas aseveraciones generalmente son correctas, no cabe más remedio que comenzar a pensar que la historia —por más doloroso o no que esto pueda resultar— es sólo lo que se habría deseado que hubiera ocurrido. O sea, algo alejado de lo que realmente sucedió. Más aún, es sólo lo que habrían deseado que hubiera acontecido quienes la escribieron, o la escriben, mediante la distorsión de hechos ocurridos en la realidad. Muchas veces les resulta necesario a los vencedores interpretar de forma cambiada los hechos, silenciar espinosas cuestiones ocurridas o, incluso, generar de la nada la historia. Precisamente por eso bien se puede pensar, siguiendo hasta sus últimas consecuencias el juego dialéctico de esas dos verdades populares, que si algo no está escrito en los medios masivos de comunicación o en abundante bibliografía, y no forma parte del "saber mayoritario", entonces no ocurrió, no pasó, no es verdad. La versión de un suceso divulgada por los medios masivos de comunicación es precisamente lo que se conoce como historia.

2. EL PROBLEMA DEL PETRÓLEO

"El mundo se divide en tres categorías de personas: un pequeñísimo número que hace producir los acontecimientos; un grupo un poco más importante que vigila su ejecución y asiste a su cumplimiento, y, en fin, una vasta mayoría que jamás sabrá lo que en realidad ha acontecido"

Nicholas Murray Butler.
Miembro del Council on Foreign Relations.

El petróleo no es precisamente un tema cuyo análisis despierte la pasión de multitudes. Generalmente, se entiende que es un tema para especialistas, demasiado técnico, con aristas muy económicas. Por esta causa, la relativamente poca cantidad de material bibliográfico que surge acerca del mercado energético mundial suele ser desechada aun por el público más ávido de información, debido a la aridez del tema. Quizá, cuando concluya este capítulo, comience a ser muy diferente la visión del lector en esta materia.

Una cosa de la que no tomamos adecuada conciencia es que la vida entera podría ser analizada desde un punto de vista de transformación de la energía. Cuando comemos, o nos vestimos, o desarrollamos cualquier actividad diaria, no estamos haciendo otra cosa que procesar energía. Cuando, por ejemplo, saboreamos un plato de pastas, lo que estamos comiendo, y por lo tanto lo que refleja su valor monetario, no es otra cosa que la semilla de trigo, más el trabajo utilizado en todas las etapas de producción, más el gasoil que se usó para cultivar los campos, más el petróleo que se empleó para trasladar la semilla a la industria molinera, más el combustible utilizado para transformar eso en harina, más la cantidad de energía, mayoritariamente concentrada en hidrocarburos, destinada a los procesos de packaging, marketing, distribución mayorista y minorista. O sea, el componente energético, en forma de hidrocarburos, es un factor muy relevante dentro del costo total del producto. Si a su vez tenemos en cuenta que los salarios abonados por el trabajo se gastan también en consumo de energía, debemos concluir —y no es sólo una paradoja— que la energía mueve al mundo. Similar razonamiento podríamos hacer sí analizáramos, por ejemplo, la salsa de ese plato de pastas —sin importar qué elementos estén en ella—, el vino, la gaseosa o el agua mineral que estemos consumiendo. La vida es imposible sin energía; la vida urbana se transformaría rápidamente en caótica si hubiera un corte brusco sin rápido restablecimiento de los flujos energéticos. Baste recordar el caos que a veces produce un mero apagón transitorio para tener en cuenta la real dimensión de este tema en caso de que una teórica escasez en la fuente del mercado energético pudiera impedir, entre otras cosas, que los alimentos entren a las ciudades.

Hay otra manera de ver este mismo tema: el sistema de precios y salarios de toda sociedad, lo cual implica en síntesis el nivel de bienestar que podemos alcanzar cada uno de nosotros, gira en torno a lo barata o cara, escasa o abundante, que sea la energía que interviene en los procesos productivos. Si volvemos al ejemplo del plato de pastas, éste resultará tanto más caro cuantas más dosis de unidades de energía requiera su elaboración, y cuanto más escasa y cara sea esa energía.

Ahora puede quedar claro, entonces, que al hablar de energía no nos referimos a un mercado más o a un bien común y corriente, fácilmente sustituible por otro, sino que hablamos de supervivencia.

Si muchas veces no nos ponemos a pensar en estas cuestiones es porque, salvo en contadas ocasiones, no hemos padecido graves problemas para hacernos de la energía necesaria para vivir y consumir los bienes que deseamos. Queda claro, entonces, que no da lo mismo que las fuentes energéticas estén basadas en recursos renovables o no renovables. Los recursos no renovables están destinados a agotarse y, si no dan lugar con el paso del tiempo a otro tipo de recursos que los suplanten, puede comenzar un proceso que no hemos vivido nunca en nuestras vidas: una lucha mucho más dura por la supervivencia. Jeremy Rifkin menciona muy bien en su obra La economía del hidrógeno que las civilizaciones que no tratan en forma cuidadosa las fuentes y cantidades de energía disponible se extinguen. Si hablamos en términos de cultura, extinguirse implica una más rápida o más lenta muerte masiva.

La inteligencia del hombre ha sido capaz de generar asombros científicos incomparables: se ha llegado a la fórmula y la posible manipulación del genoma humano, hace más de tres décadas se llegó a la Luna, nos podemos comunicar en forma instantánea con alguien en otra parte del planeta prácticamente sin costo, y se puede dar la vuelta al mundo en horas cuando hasta hace un par de siglos demandaba meses. A pesar de todo este enorme progreso, la energía con la cual nos movemos, y movemos todos los bienes, es básicamente la misma que se usaba hace un siglo y medio, es un recurso no renovable, escaso, contaminante y que ha ocasionado terribles guerras, varias de ellas recientes.

¿No ha sido el hombre capaz de crear un sustituto? Dos grandes firmas automotrices están haciendo ensayos preliminares para que el combustible de sus automóviles sea el hidrógeno. De todas maneras, se trata de algo aún muy incierto en el tiempo y con escasa o nula programación estatal en la materia. O sea, no hay planes gubernamentales importantes para fomentar que el petróleo sea reemplazado por un recurso energético renovable. A mediados del 2003, tras la guerra con Irak, George W. Bush continúa dilatando la decisión acerca de la licitación entre universidades norteamericanas para estudiar en forma hipotética cómo desarrollar la tecnología del hidrógeno. Por lo tanto, si han sido creados sustitutos de los hidrocarburos fósiles, con buenos resultados, permanecen en el anonimato. No es nada improbable que los enormes intereses que hay detrás del oligopolio mundial petrolero hayan provocado su silenciamiento. Cuando hablamos de monopolio u oligopolio mundial petrolero debemos referirnos ineludiblemente a las empresas derivadas de la antigua Standard Oil, compañía creada luego de la guerra civil norteamericana por el ya mencionado John D. Rockefeller

I. Haciendo un poco de historia

Rockefeller, en muy poco tiempo, se transformó en un tácito monopolista de la industria petrolera norteamericana. Llegó a concentrar en sus manos el 95% de la exploración, explotación, distribución y venta minorista de gasolina en EE.UU. Siempre pensó que el negocio petrolero debía estar integrado en forma vertical, o sea, una misma firma debe controlar todas las etapas de producción. Y que la clave del negocio en sí mismo era tener bajo su órbita el proceso de distribución, por lo que llegó a obtener un acuerdo con importantes descuentos con los ferrocarriles que controlaba JP Morgan, acuerdo que resultó a la postre ruinoso para todos sus competidores, a los que uno a uno fue desplazando del mercado, muchas veces mediante la aplicación de métodos semicompulsivos o compulsivos. Ese accionar empresarial, carente de preceptos morales, o de códigos, era común en la decena de empresarios que comenzó a controlar la economía norteamericana tras la muerte de Abraham Lincoln. Se trataba de empresarios profundamente odiados por la población en su conjunto, por lo que ya en aquella época fueron bautizados The Robber Barons (Los Barones Ladrones), expresión que quedó a través de los tiempos, y con la cual aún hoy muchos los recuerdan, a pesar de la acción de una cantidad de biógrafos a sueldo que, con el transcurso de las décadas, la falta de conocimientos reales de historia del pueblo norteamericano y el paso de las generaciones, ahora intentan mostrar un pasado mucho más rosa. Por ejemplo, en su voluminosa biografía de John D. Rockefeller I, el historiador oficial con que hoy cuenta la élite norteamericana, Ron Chernow, titula la biografía de John D. Rockefeller I con el nombre de Titán, y lo representa como un personaje ambivalente. En cuanto a biografías, es necesario mencionar que aquellas que citaban con más detalle algunos de los actos de crueldad y barbarie atribuidos al clan han desaparecido casi por completo del mercado bibliográfico, al punto que han caído en el olvido episodios tales como la masacre de Ludlow, cuando gente propia de Rockefeller en 1913 mató a mujeres y niños por plegarse a una huelga de la Colorado Oiland Fuel, empresa propiedad de esa familia. Incluso las recientes biografías para televisión que realizaron tanto History Channel como PBS muestran a Rockefeller, el primer billonario del mundo, casi como un altruista, un poeta, cuando el saber popular recuerda que sus asesores le recomendaban darle algunas monedas a los niños pobres cuando había fotógrafos cerca, lo que no se le ocurría al propio empresario, cuya máxima ambición en la vida, además de juntar dinero y poder, fue llegar a cumplir 100 años, de lo que estuvo muy cerca, al morir en 1937 a los 98 años de edad.

El odio popular a los Robber Barons era en aquellas épocas enorme. Se trataba cada vez más de una casta monopolista en sus diferentes actividades, de un verdadero equipo que se ayudaba solidariamente entre sí, cuyos vástagos se casaban entre sí a fin de que no se diseminaran las fortunas familiares. Si bien un siglo antes Adam Smith había comenzado a idear la tesis del individualismo como base de la competencia perfecta, quienes detentaban el poder económico en Estados Unidos a fines del siglo XIX constituían en realidad una verdadera corporación. Tan corporativo y concentrado era el poder económico que en 1890 el gobierno norteamericano se vio en la obligación de dictar la llamada "Ley Sherman", legislación antitrust, que tardó 21 años en ser aplicada para el caso del petróleo. Recién en 1911 se ordena la división de la Standard Oil, que pasa así a fracturarse en una serie de empresas más pequeñas estaduales, pero que siguieron durante muchísimo tiempo constituyendo un monopolio en las sombras debido a una conjunción de factores. En primer lugar, el clan Rockefeller recibió un porcentaje de acciones de cada una; en segundo lugar, las particulares condiciones de la Bolsa norteamericana, donde el capital accionario está singularmente atomizado, hacen que con una pequeña fracción del total de las acciones se pueda controlar toda la empresa, sus políticas comerciales y financieras, y hasta el nombramiento de los directores. Los propios bancos relacionados desde fines del siglo XIX con el clan Rockefeller facilitaron que la desmonopolización haya sido sólo un intento vano: una ley presuntamente cumplida, tras la cual hay un monopolio en las sombras. Este proceso se agudiza cuando comienza a proliferar una inmensa gama de fondos de pensión e inversión, en los que la población norteamericana coloca sus ahorros y los fondos para su jubilación. Estas entidades, muy relacionadas con los bancos, han invertido ingentes cantidades de fondos en comprar aún más acciones de estas empresas. Como estos fondos de inversión y pensión en muchos casos son propiedad de los bancos de la élite norteamericana, o están relacionados con ellos, ésta ha encontrado una "pócima mágica" no sólo para seguir controlando lo que antes eran monopolios dirigidos de manera unipersonal sino para ejercer su dominio sobre muchos otros sectores a los que no hubiera podido acceder si no se hubiera dado esta singular forma de estructura financiera que existe aún hoy en WallStreet. Poseyendo el 5 o 10% de una empresa, y administrando otra parte, aun cuando no sea de fondos propios sino con los ahorros de la gente invertidos en bancos y fondos de pensión e inversión, se puede controlar totalmente un mercado tan estratégico como el energético.

El caso del clan Rockefeller es quizás el principal emblema, pero no el único. Durante buena parte del siglo XX, el monopolio petrolero anglonorteamericano fue rebautizado como "The Seven Sisters" (Las Siete Hermanas). Pero el proceso de gran concentración del capital vivido en la década del 90 ha hecho que se dejaran de guardar las apariencias y las empresas petroleras volvieran a fusionarse. De seguir a este ritmo, ya poco faltaría para volver a la primitiva Standard Oil. En efecto, la familia Rockefeller controla los conglomerados petrolíferas Exxon Mobil, Chevron Gulf Texaco y Amoco British Petroleum. También le corresponde, por ejemplo, y entre muchos otros intereses petrolíferos en el resto del mundo, una proporción muy importante en el petróleo que Repsol posee en la Argentina dado que Aznar vendió en 1997 acciones de Repsol en la Bolsa de Madrid y fueron compradas nada menos que por el Chase Manhattan Bank.(1) Este banco, también controlado por la familia Rockefeller, adquirió recientemente al JP Morgan, al Chemical Bank y al Manufacturers Hannover. Desde hace tiempo, la misma familia también controla al Citibank e influye decisivamente en el Bank of America. En realidad, hay una gama de negocios que sigue oligopolizada en las sombras en Estados Unidos, a pesar de la legislación en la materia. Es necesario volver a remarcar que el capitalismo en su versión norteamericana produjo un enorme auge de cotizaciones en la Bolsa de todo tipo de empresas. Con una muy pequeña proporción del capital accionario de ellas y de los fondos de inversión o pensión que luego invierten una enorme parte de lo que recaudan en las mismas acciones cotizantes, una pequeña élite influye decisivamente en las políticas de las mega empresas de esos sectores. Ello ocurre más visiblemente en los negocios de banca y finanzas, petróleo y energía, laboratorios y salud, educación y universidades. Todas estas ramas de la producción están relacionadas entre sí a través de los clanes elitistas controlantes de los sectores en bloque. No se trata de un esquema cerrado en sí mismo sino con derivados a otros sectores de la actividad como, por ejemplo, la industria de armamentos. Debe tenerse en cuenta que en el oligopolio mundial energético también tiene una vital influencia la empresa Royal Dutch Shell, en parte propiedad de las coronas británica y holandesa, y financiada en buena medida por la familia Rothschild, antigua financista europea de varias coronas reales, sobre todo a la hora de financiar guerras. Se caracterizaba por auxiliar financieramente a la vez, a los dos bandos.

(1) Algo similar ocurrió con Telefónica de España. Las acciones vendidas en la Bolsa de Madrid por el Estado Español fueron compradas en forma mayoritaria por bancos estadounidenses muy relacionados con el dan que controla el petróleo norteamericano.
1 La industria farmacéutica trabaja, tal como lo hace la petroquímica, con derivados directos del petróleo. El crudo se solía vender en pueblos y ciudades norteamericanos mezclado y enfrascado como "remedio milagroso" para gran cantidad de males, como el cáncer, antes de 1860. William Rockefeller, padre del fundador de la Standard Oil, se dedicaba a esa actividad.

Según abundante información, esta misma familia también es la prestamista original de los Rockefeller y de todo el desarrollo petrolífero, ferroviario y bancario en Estados Unidos, a través de las familias Morgan (banca y ferrocarriles), Harriman (ferrocarriles y altas finanzas) y Rockefeller (petróleo y banca). Los ferrocarriles no eran un negocio de transporte más en el siglo XIX. No había transporte aéreo, no existía el transporte de carga por carreteras, no había red de autopistas. Tan sólo una de las pocas empresas ferroviarias en Estados Unidos rivalizaba con el propio gobierno federal en cantidad de obreros empleados. Ello significa que haber controlado cuasi monopólicamente ferrocarriles, petróleo y bancos implicaba controlar el real poder en Estados Unidos. Resulta llamativo, entonces, que la familia Rothschild, en la reciente biografía oficial escrita por Nial Ferguson en dos tomos, en Oxford, intente mostrarse a sí misma como en decadencia desde mediados del siglo XIX, precisamente por no haberse podido instalar como banca en Estados Unidos, y perder el control de la situación cuando Nueva York comienza a rivalizar con Londres como centro financiero mundial. Ello se da de bruces con el control que dicho grupo económico ejercía por medio de la financiación sobre los tres principales negocios de Estados Unidos. Sin embargo, esa voluntad propia de aparecer cada vez más en el anonimato va de la mano con el hecho de que el clan Rothschild sólo presta en la actualidad su apellido a bancos de inversión singularmente pequeños.

Energía y Poder

Aunque existen algunas otras grandes empresas en el mercado petrolífero mundial, generalmente se trata de compañías estatales de países sin petróleo, como el caso de la ENI (Italia) o Total FinaElf (Francia). En el caso de varios países árabes, el petróleo ha quedado en manos de un monopolio árabe norteamericano (Arameo), cuyo control al menos comparte el clan Rockefeller. Arabia Saudita posee más de un quinto de las reservas mundiales de petróleo que quedan en el planeta. Actualmente, en el mercado petrolífero mundial, las compañías estatales tienden a ir concentrando una proporción cada vez más importante en las fases más primarias de la producción, o sea, en la exploración, extracción y a veces refinación del petróleo. Por su parte, las mega empresas privadas anglonorteamericanas quedan con una proporción cada vez más importante en las etapas finales de la producción (distribución y venta minorista). Si esta tendencia que se agudiza al ritmo de la propia extinción del petróleo norteamericano y en aguas inglesas siguiera, las empresas privadas anglonorteamericanas perderían una buena cuota del poder real que les otorga el haberse constituido desde hace más de un siglo como un verdadero monopolio en las sombras, dado que no contarían casi con petróleo propio, sino que dependerían de la buena voluntad de empresas petroleras estatales, reales dueñas de yacimientos. Si nos detenemos a pensar un poco en este punto, se observa que la decisión de ir a Irak e invadirlo contra viento y marea es una decisión estratégica con miras a estar donde está el petróleo, a manejarlo y extraerlo como si fuera propio, y a no depender de la buena voluntad de empresas estatales y líderes nacionales. En suma, a la necesidad de conservar el poder que otorga el tener como propias las escasas fuentes de energía no renovables que hoy resultan fundamentales para la vida humana y, sobre todo, para la vida urbana.

Controlar la energía es tener el poder. Si el más importante recurso energético es escaso y no renovable, como el petróleo y el gas, quienes manejen ese bien tienen el poder. Si las principales fuentes de energía se basaran en recursos renovables —y hay que tener en cuenta que toda la materia es fuente potencial de energía—, ningún minúsculo grupo podría tener el poder, porque las decisiones humanas de consumo bien podrían independizarse mucho más de la necesidad de trabajar. O sea, la necesidad de trabajar para vivir en el mundo contemporáneo se debe, en muy buena medida, a que al ser el petróleo un bien escaso, y por lo tanto oneroso, hace mucho más costosos los bienes que consumimos usualmente.

¿Cuál es, entonces, a la luz de la guerra en Irak y de la ocupación de Afganistán, la verdadera situación del mercado petrolero? ¿Es el petróleo abundante o escaso? ¿Urge su reemplazo o tenemos tiempo? En Internet se puede acceder con facilidad al sitio oficial de la International Energy Agency. Dicho sitio proporciona abundante información. Si bien no hay datos por empresa, si hay datos de producción, consumo, reservas, precios, etc., tanto de petróleo como de gas natural. Las conclusiones más importantes que se pueden extraer son las siguientes:

Hacia el 2002, quedaban reservas de petróleo compatibles con el consumo actual mundial para 35 años. (Si bien al actual ritmo de producción se podría extraer petróleo durante más de 80 años en Arabia Saudita y durante más de 110 años en Irak, ambos países deberán multiplicar en el muy corto plazo su producción para compensar la extinción de pozos petroleros en Estados Unidos, Inglaterra, Rusia y México. De ahí que haya petróleo en el mundo para sólo 35 años en los niveles actuales de consumo.) Es necesario mencionar que, a esta altura, ya prácticamente todo el planeta ha sido explorado, quedando algunas dudas aún sobre el potencial que podrían tener un sector de la costa de Groenlandia, el Congo y la cuenca del Níger (país al cual el presidente George W. Bush y la CÍA acusaron en su momento de vender uranio a Saddam Hussein, acusación que se comprobó falsa).

El 70% de todas las reservas mundiales de petróleo se encuentra concentrado en el Golfo Pérsico; Arabia Saudita, Irak, Kuwait, Emiratos Árabes Unidos e Irán. En el plazo de una década, más del 80% del petróleo mundial estaría en esa región. Otro 10% del petróleo mundial también se encuentra en países musulmanes como Libia, Nigeria e Indonesia. Hoy, el 80% de petróleo del mundo está en manos musulmanas, y ese porcentaje tiende a subir con el paso del tiempo. Dado que el petróleo comenzó a utilizarse como fuente energética en Estados Unidos luego de la Guerra Civil, y en aquella época sólo se lo conocía en forma abundante dentro de Estados Unidos y en Rusia, estratégicamente resultaba no sólo cómodo sino también sumamente viable comenzar a basar la energía en hidrocarburos fósiles. El combustible saudí sólo vio la luz en 1938. Y fue, con el paso de las décadas, que el mundo se llevó la sorpresa de que estaba concentrado mayoritariamente en torno del Golfo Pérsico. Entonces puede comenzar a quedar un poco más claro el porqué de la frecuente propaganda contra países de origen musulmán, dado que el intento de basar la energía del planeta en un recurso escaso, que se encontrara sobre todo en el subsuelo estadounidense, naufragó a medida que se iban secando los pozos petrolíferos de Texas, cosa que comenzó a ocurrir hacia los años '60, y se iban descubriendo cada vez más yacimientos gigantescos en países árabes (lo que terminó de ocurrir en los años '80).

Muy cerca del techo

Estados Unidos tocó el techo de su producción anual de petróleo en el año 1970, con algo menos de 10 billones de barriles anuales de crudo. Hoy apenas si puede producir 5 billones de barriles por año. Ello, a pesar de que se ha incorporado la un tanto decepcionante —en cuanto a su magnitud— cuenca petrolífera de Alaska al mercado. Todo esto al costo de comenzar a generar un preocupante problema ambiental, y aunque se han desarrollado y aplicado nuevas tecnologías extractivas, las que, por ejemplo, introducen gas a presión en la roca de los yacimientos para virtualmente "secar" las rocas de petróleo y aumentar la posibilidad extractiva de pozos vecinos, incrementando de forma importarte el recupero de la inversión en los pozos. A pesar deque estas cifras indican una realidad energética preocupante al menos dentro de los propios Estados Unidos, el gobierno de George W. Bush muestra una gran lentitud en las tareas preliminares previstas para licitar entre las universidades norteamericanas algunos fondos para el estudio de tecnologías masivas qué reemplacen al petróleo. Esa pereza se contrapone a la enorme rapidez con la cual el mismo gobierno decidió efectuar la licitación de las obras petrolíferas por desarrollarse en Irak, que ganó antes de la propia caída de Bagdad y Basora una filial de la empresa Halliburton (Kellogg), la que fue hasta hace poco dirigida por el propio vicepresidente norteamericano, Dick Cheney. Desde ese año 1970, cuando Estados Unidos alcanzó el denominado "techo de producción anual", ésta no ha cesado de declinar, como lo indican las cifras antes comentadas. El descenso ha sido particularmente mayor en los años '90 y en el inicio de este siglo, ya que a lo largo de una década cayó casi 20%. Hacia 1950, Estados Unidos producía prácticamente el 100% del petróleo que consumía y era el primer productor mundial. Importaba algo de petróleo, pero también exportaba. Hoy, Estados Unidos no llega a producir 45% del petróleo que consume. Sigue siendo el primer consumidor mundial, con casi un cuarto del consumo de todo el planeta. Se calcula que, al actual ritmo de producción, el petróleo norteamericano se extinguirá en el año 2010. Peor aún es la situación en Inglaterra: los pozos descubiertos en el Mar del Norte, cuya propiedad comparten Inglaterra y Noruega, sobre los que se llegó a pensar en su momento que eran mucho más grandes, han resultado menos abundantes que lo previsto, y se calcula que Inglaterra se quedará sin petróleo aproximadamente en el año 2006. Fuera de los países musulmanes, el petróleo es aún abundante sólo en Venezuela (recordar el intento de golpe contra Chávez efectuado por sectores empresariales muy relacionados con el establishment petrolero de Estados Unidos y la CÍA) y algunas de las ex repúblicas de la URSS. En mucha menor medida en China, Libia y México. Y... en ningún lado más.

Desde mediados de la próxima década, el petróleo estará entonces tan concentrado en tan pocas manos, y tan escaso resultará en Estados Unidos, que ello puede ayudar a explicar la verdadera naturaleza de las guerras que hemos visto en el siglo XXI. La decisión hasta el momento ha sido no sólo ir tras el petróleo, sino también seguir férreamente con la tecnología de ese combustible. Hemos mencionado que las cifras oficiales indican que hay reservas mundiales para 35 años. Ello puede generar una falsa idea: que hay por lo menos tres décadas de tiempo antes de que se produzca una grave crisis energética; que todo es cuestión de encontrar métodos pacíficos de solución a los conflictos, de manera tal que el comercio de petróleo del Golfo Pérsico a Occidente y Japón se realice en forma fluida evitándose las fricciones que hubo con los talibanes (Afganistán, por su particular enclave, es importante para el paso de gasoductos) y con Irak. De esa manera, si nos guiamos por las cifras oficiales de la International Energy Agency, aún hay cierto tiempo —no mucho, pero tres décadas es un plazo apreciable—, y las tensiones bélicas de inicios de este siglo bien podrían ceder si se diera con la gente indicada para gobernar los países. O sea, si los conflictos entre Estados Unidos y el mundo musulmán los resuelve otra clase dirigente, distinta de la que hoy está sentada en la Casa Blanca y en varios países musulmanes. Si seguimos por esta línea de pensamiento, debemos limitarnos a calcular cuál sería la real magnitud del déficit estructural adicional en las balanzas de pagos de Estados Unidos e Inglaterra, producido por el hecho de tener que importar todo el petróleo que aún producen en su propio territorio, pero nada más que eso. Ello requeriría de un mayor "ajuste de cinturón" de las poblaciones de ambos países, pero nada del otro mundo, nada que no se haya ya visto en el pasado en cuanto a ajuste recesivo. Después de todo, el 55% del petróleo que consume Estados Unidos —que es importado— representa entre 1 y 1, 5% de su PBI, según la cotización del barril. Es decir, el impacto de dejar de producir petróleo, importando el restante 45% que hoy aún produce internamente Estados Unidos, equivaldría a cerca de otro 11,5% de su PBI, si se soluciona el conflicto a través del comercio internacional. Si bien hoy, en pleno 2003, Estados Unidos tiene un muy abultado déficit de balanza de pagos del orden de 5,2% de su PBI, un déficit adicional de 11,5% lo colocaría en las puertas de una recesión más pronunciada que la que ha venido evidenciando desde el año 2000, y quizás en la necesidad de una más apreciable caída del dólar, Pero no se trataría de nada imposible de manejar. A todas estas conclusiones se puede llegar, entonces, si se atan lo suficiente los cabos sueltos a partir de las cifras oficiales de la International Energy Agency.

Pero lamentablemente estaríamos frente a un espejismo, mucho más grande aún que los que se suelen padecer en los desiertos bajo los cuales se encuentra el petróleo.

Ocurre que el petróleo no es como el agua o el aire, ni como el dinero. No se puede extraer al ritmo que se desea ni se encuentra en forma uniforme ni es siempre de la misma calidad. Por empezar, en las reservas suelen figurar petróleos especialmente pesados, que suelen ser de mucho más bajo valor energético y caros de procesar, petróleo que aún hoy no se sabe procesar bien por su bajo valor energético y económico. Hay incluso tipos de petróleo que aún hoy no poseen valor económico, y otros ubicados en zonas de muy difícil acceso, cuya explotación seria tan cara que sólo tendría sentido con un precio mundial del crudo compatible con cerca de 80 dólares el barril a valores del presente, actualizados por la tasa de inflación en Estados Unidos, al que se llegó durante la segunda crisis petrolera mundial a raíz del conflicto entre Estados Unidos e Irán en 1979. Esto implica que un porcentaje indeterminado pero apreciable de las cifras oficiales es petróleo que está en las estadísticas pero no en la realidad.

En segundo lugar, y en forma aún mucho más importante, hay que tener en cuenta que el petróleo no va a empezar a faltar desde el año en que teóricamente se extinga (alrededor del 2035 2040), sino desde cuando se alcance lo que se denomina "techo mundial de producción". El "techo mundial de producción" es la máxima cantidad posible de petróleo que se puede producir en un año y depende de las características geológicas de los pozos, del tipo de crudo, de la tecnología extractiva que se use. etc.,etc. En el mundo, todavía nos encontramos en la fase ascendente de producción mundial del crudo. Medir su disponibilidad por la cantidad de años de reservas existentes implicaría aplicar un cálculo lineal de posibilidades de extracción. O sea, significa pensar que todos los años se puede extraer la misma cantidad y un poco más. La realidad es diferente. Existe primero un período ascendente, de producción año tras año superior, causado por el hecho de que van entrando al circuito productivo más yacimientos que los que se van "secando." Luego se alcanza el "techo mundial de producción", y ésta se estanca cerca de esa cifra durante un período breve de algunos años. Finalmente, comienza un período de producción declinante año tras año, originado por el hecho de que ya no pueden agregarse a la producción nuevos yacimientos al mismo ritmo al cual van saliendo de circulación y agotándose muchos de ellos, ya secos. Hoy el planeta ha ingresado en la última parte de la curva ascendente del ciclo de producción del petróleo. Al "techo mundial de producción" aún no se ha llegado. Cuánto falta para alcanzarlo es un dato clave para la economía del mundo entero. El "techo de producción" sí ha sido alcanzado, por ejemplo, en países como en Estados Unidos. Hemos mencionado que el "techo de producción norteamericano" se tocó en el año 1970, y debe recordarse muy especialmente que en 1973 se produjo una de las dos crisis energéticas mundiales más graves de que se tengan noticias, cuando la historia oficial indica que Arabia Saudita produjo un embargo petrolero a los países occidentales que ayudaron a Israel a ganarla guerra de ese año. En aquellos años '70 eran frecuentes las colas en las estaciones de servicio, el racionamiento de combustibles y la inflación descontrolada en muchos países a consecuencia de las subas de precios de los hidrocarburos evidenciadas en todo el mundo como consecuencia de la desaceleración inevitable que se produjo en la producción de crudo norteamericana, factor que en realidad jugó un papel preponderante en la triplicación de los precios del crudo a inicios de los años '70.

A partir del momento en que se toque el "techo de producción" mundial, se va a evidenciar una serie consecutiva de bruscas escaseces de petróleo. El mundo habrá alcanzado su máximo ritmo de producción mundial, a partir de cuyo momento, año tras año, habrá cada vez menos petróleo disponible para alimentar a cada vez más habitantes de la Tierra y a economías que pugnarán por seguir creciendo a un ritmo superior al 2% anual, mínimo umbral considerado aceptable, lo que sería inalcanzable para todos los países en forma conjunta en un mundo en el que cada día habría menos petróleo. De esta manera, el planeta se encuentra frente a una disyuntiva que debe solucionarse por alguna de estas tres vías, o una combinación de las mismas, de aquí a cierto tiempo:

a) una importante reducción en la tasa decrecimiento demográfica a escala global y presumiblemente una declinación de la cantidad de habitantes en la Tierra;

b) una muy profunda recesión a escala global que produzca una reducción apreciable en el nivel de vida de la población global como promedio;

c) el abandono gradual pero acelerado de la tecnología del petróleo. En términos económicos, esa serie de crisis internacionales se verificaría mediante subas bruscas e imprevistas en la cotización del petróleo y/o con la aparición de nuevas guerras, que sólo alguien muy ingenuo puede creer que casualmente se sitúen cerca de donde existen grandes yacimientos de hidrocarburos, o en las zonas de su paso. Para dar una idea de la magnitud del problema frente al cual estamos, es necesario mencionar que hoy en día más de 85% de toda la energía mundial proviene de hidrocarburos fósiles. Sólo 7% tiene su origen en la energía hidroeléctrica, y en porcentajes menores aún las demás fuentes. Esto implica que no va a ser posible reemplazar los hidrocarburos fósiles con fuentes energéticas hoy existentes, sino que se deberá generar una tecnología alternativa.

Otro espejismo que suele aparecer comúnmente es el relativo a la posibilidad de utilizar carbón como recurso energético reemplazando al petróleo y al gas natural. El carbón es bastante más abundante que ambos. Estados Unidos posee carbón para 300 años en su actual nivel de consumo. En el mundo, cifras comparables pueden obtenerse para muchos países. Sin embargo, si el consumo de carbón se acelerara para reemplazar al gas y al petróleo, la cantidad de reservas se reduciría dramáticamente. Rifkin calcula que con tan sólo un crecimiento anual de 4% en el consumo anual de carbón, las reservas norteamericanas sólo alcanzarían para 65 años. Además, el carbón posee muchos inconvenientes: no es fácil extraer de él combustibles líquidos, y es muy costoso. Por lo tanto, no es un sustituto apto del petróleo y del gas natural. Adicionalmente, hay que tener en cuenta que el carbón es un hidrocarburo "sucio", muy contaminante, difícil de cargar y transportar.

Pues bien entonces, lo importante, lo central, es determinar cuál será el año en el que se produzca el "techo mundial de producción". A partir de ese momento, despertaremos del largo sueño que hemos venido viviendo y nos daremos cuenta de que la energía es un bien mucho más escaso que el espejismo de abundancia que hoy nos parece, además de que comenzarán a cobrar otro significado las guerras del siglo XXI. Una buena cantidad de los porqués a brutales episodios hoy incomprensibles para muchos adquirirá su verdadera perspectiva si no comienza a acelerarse el cambio tecnológico, cosa que va precisamente en dirección opuesta a los intereses del oligopolio petrolero mundial. Si se encuentra un recurso energético renovable y barato para reemplazar al petróleo, los enormes pulpos petroleros enfrentarían una extinción muy acelerada.

El "techo mundial de producción" es, entonces, el dato crucial que es necesario tener en el análisis porque marca el límite entre una producción en alza y una que comienza a ser declinante. La cantidad de años de reservas, que hemos dicho que son 35, parte del supuesto de que se puede producir petróleo en forma constante, y ya hemos explicado que no es así. La determinación de ese año es un cálculo que sólo los geólogos pueden efectuar basándose en sus estudios sobre los pozos en todo el planeta. Los geólogos están divididos entre "optimistas" y "pesimistas". En el caso de lo evidenciado ya en Estados Unidos en 1970, la batalla la ganaron los "pesimistas". Peor aún, triunfó el más pesimista, dado que el consenso hablaba de una imposibilidad de que la producción tocara su techo en 1970, cosa que ocurrió y generó una gran crisis sólo tres años más tarde. En el caso del mundo, los "optimistas" esperan que el "techo mundial de producción" sea alcanzado entre el 2014 y el 2018. En ningún caso esperan que se alcance después del año 2020. Los "pesimistas" esperan que el "techo mundial de producción" se alcance hacia el año 2010 y algunos de ellos esperan que ello ocurra en el 2004.

Una buena parte de la aparente aceleración que ha tenido la historia en el comienzo de este milenio, con la aparición de sucesos inéditos anteriormente, se debe precisamente a los datos anteriores. Ocurre que en los años '90 comenzó a hacerse evidente que parte de las reservas oficiales de petróleo que quedaban en los estados de la ex URSS y los países árabes en general estaban sobredimensionadas en las estadísticas, probablemente ex profeso, dado que los pozos petrolíferos servían como garantía para préstamos bancarios, lo que en algunos casos motivó una intención de "inflar" artificialmente el contenido de los yacimientos. Es como si hubiéramos subido la ladera de una montaña empinada, en forma esforzada, sólo para caer en la cuenta, una vez en la cima, de que la ladera que habrá que transitar de aquí en más, hacia abajo, es mucho más empinada, y por lo tanto riesgosa, de lo que se pensó.

Mirando para otro lado

A partir de estos cálculos surgen varios interrogantes. El primero de ellos es por qué el gobierno norteamericano no aconseja a su poblador ahorrar el máximo posible de petróleo. Cuando en el año 1973 se produjo la crisis petrolera, en buena medida gestada por las empresas multinacionales estadounidenses y británicas, de la que luego se acusó sólo a los países árabes, el gobierno de Nixon aconsejaba en los medios de comunicación el ahorro de combustibles. Se trataba sólo de una crisis temporaria hasta que técnicamente fluyera mayor cantidad de petróleo del Golfo Pérsico, para reemplazar el que comenzaba a escasear en Estados Unidos y, aunque la solución era sólo una cuestión de tiempo, el gobierno cumplía con el deber de guiar a la población en lo que parecía ser una necesidad perentoria: ahorrar energía.

Hoy, en cambio, tras la invasión al segundo país con más reservas de petróleo del mundo: Irak, y con el planeta ya muy cerca de su límite de capacidad productiva de petróleo, ninguna voz del gobierno norteamericano se alza para aconsejar el ahorro de energía. Mucho más llamativo resulta esto si se tiene en cuenta que el actual gobierno estadounidense ha sido prácticamente copado por la industria petrolera. El presidente George W. Bush dirigió o formó varias empresas: Arbusto Energy, Bush Energy, Spectrum 7, Harken. Su padre fue cofundador de la polémica empresa Zapata Oil, luego dividida en Zapata Oil y Zapata Offshore(3). La máxima asesora en materia de seguridad.

(3) Zapata Offshore, empresa presuntamente relacionada en forma directa con la operación frustrada de invasión a Cuba de inicios de los '60, conocida como Bahía de los Cochinos, y cuyo nombre de código interno de la CÍA no por casualidad habría sido "Operación Viva Zapata".

del gobierno de Bush, Condoleezza Rice, jefa del National Security Council (NSC), también proviene de la industria petrolera, más específicamente de Chevron.

El caso del actual vicepresidente y ex ministro de Defensa del padre de Bush, Dick Cheney, es todavía más llamativo. Durante los '90 dirigió la empresa Halliburton, principal proveedora mundial de insumos al sector petrolero. Hizo jugosos negocios vendiendo abundante material por miles de millones de dólares a Saddam Hussein para que éste se preparara en su afán de triplicar la oferta de crudo iraquí. El problema que luego se suscitó es que Saddam Hussein decidió excluir a las empresas norteamericanas y británicas del proceso de concesión de los pozos iraquíes, basando su estrategia en contratar sobre todo petroleras estatales de Europa continental. Si Saddam hubiese logrado ese objetivo, dado que el petróleo se está agotando en Estados Unidos y en Inglaterra en forma simultánea, la declinación en el volumen de negocios de las petroleras anglosajonas las hubiera condenado a un brutal achique. Habría un mayor dominio del mercado por parte de las empresas estatales de petróleo.

De todas formas, no puede pensarse que el establishment petrolero norteamericano haya sido tomado por sorpresa por la estrategia de Saddam Hussein, dado que la invasión a Irak comenzó a planearse a más tardar en 1997, a través de un reducido núcleo de intelectuales y hombres de acción del Pentágono, entre los cuales se encuentran Paul Wolfowitz, Richard Perle y otros, junto a Francis Fukuyama. El thinktank se llama "Project for the New American Century". Ese núcleo de gente, que evidentemente no se reunió por casualidad y que representa el ala más fanática del pensamiento conservador norteamericano, es en realidad una especie de desprendimiento del omnipresente pero siempre misterioso y secretivo Council on Foreign Relations (CFR), para algunos el verdadero gobierno en las sombras en Estados Unidos. Esto hace pensar que el establishment petrolero norteamericano le vendía material petrolero a Saddam con objeto de que se fuera construyendo infraestructura a fin de aumentar la producción, al mismo tiempo que planificaba su futuro derrocamiento. Cabe recordar que mientras esto ocurría, los medios de comunicación difundían la noticia de que el jefe de inspectores de armas, en aquel entonces en Irak, Scott Ritter, declaraba que el régimen de Hussein no sólo no tenía armas de destrucción masiva sino que no estaba siquiera en condiciones de generarlas.

No sólo las guerras en el Golfo Pérsico han sido inducidas por motivos energéticos. La historia política y económica del mundo de los últimos cincuenta años gira en torno a este tema. La bonanza económica y el alto crecimiento de los años '60 se explican por el bajísimo precio del barril de los países árabes (entre 1,5 y 3 dólares por unidad de crudo). Los agudos procesos están flacionarios (recesión con inflación) de los años '70 se debieron al comienzo de la declinación en la producción norteamericana de combustibles, a la escasez de energía —para muchos, como Antony Sutton, creada bastante artificialmente en 1973— y al afán de las grandes empresas petroleras de incrementar sus ganancias, cosa que ocurrió mediante las dos crisis petroleras de los años 1973 y 1979. En este último año, el barril llegó a valer casi 80 dólares a valores actualizados. Los años de "vacas gordas" para las petroleras y "vacas flacas" para la gente fueron generando un problema: los países árabes se fueron enriqueciendo de una manera que algunos en Occidente comenzaban a considerar peligrosa. Los petrodólares empezaban a inundar los mercados financieros. Arabia Saudita se daba el lujo de ser el segundo mayor accionista del Fondo Monetario Internacional, y el Islam amenazaba con transformarse en un polo propio de poder cuyo epicentro bien podría haberse situado en Bagdad, por una confluencia de factores. No debe extrañar, entonces, que durante los años '80, en la era Reagan Bush, el precio del barril declinara a niveles anteriores a la segunda crisis petrolera. Esto produjo durante buena parte de los años '80 y '90 otro periodo de aceptable crecimiento mundial, bajas tasas de inflación y facilitó el progreso de la globalización, al mismo tiempo que quitó al Islam —y sobre todo también a la ex URSS, cuyo principal producto de exportación era el petróleo —4) la posibilidad de constituirse en un polo propio de poder. Claro que el problema es que esto se logró consumiendo petróleo a un ritmo mayor de aquel con que se realizaban nuevos descubrimientos. Todas las crisis energéticas de las cuales el mundo fue testigo se resolvieron de una única manera: aumentando la producción de combustibles fósiles. Esto es lo que ya no será posible desde algún momento de los próximos diez años, cuando se alcance el "techo mundial de producción".

El gobierno estadounidense no puede desconocer, entonces, la crítica situación del mercado energético, que lo ha llevado incluso a invadir países en forma acelerada. Si sus intenciones son altruistas, no se entiende por qué no existe ya una campaña para el ahorro de combustible hasta encontrar un sustituto del petróleo, sí es que éste no existe ya.

¿Un Mundo Feliz?

La energía es, entonces, el principal limitante a la globalización que, por otra parte, el propio establishment norteamericano propugna como remedio para todos los males sociales y económicos del planeta. Los problemas van a ser muy serios: China, que viene creciendo notablemente, incorporando mensualmente millones y millones de trabajadores a su oferta laboral merced a las exportaciones que viene realizando a Occidente, muy probablemente encontrará que no le resultará posible mejorar la calidad de vida de sus habitantes con el ahorro que significa el.

(4) EE.UU. logró a principios de los años '80, merced a un acuerdo secreto con Arabia Saudita, que dicho país exportar a mayores cantidades de petróleo que las necesarias para el consumo. El objetivo era derrumbar el precio del barril, no sólo para facilitar una reactivación en EE.UU., sino también para dificultar el acceso a las divisas por parte de la URSS, a la cual Reagan Bush querían derrotar definitivamente en la era de la Guerra Fría (cosa que consiguieron sólo unos años más tarde). A cambio de ese exceso de petróleo en el mercado, EE.UU. proveía de armas a Arabia Saudita, preocupada en aquella época por que Irán pudiera derrotar a Irak en la guerra, y amenazar la seguridad saudí.

Trabajo acumulado de centenas de millones de chinos, quienes durante años produjeron y vendieron al exterior privándose de consumir.

La masa de ahorro acumulado en el Banco Central chino, que supera los US$ 350 mil millones, y que sigue creciendo, no podrá destinarse a mejorar la calidad de vida de los habitantes de esa nación porque la restricción energética que se nos viene en forma acelerada comenzará a operar como un serio limitante a la tasa de crecimiento global en poco tiempo más. Una elevación importante del nivel de vida de la población china es sólo una quimera si se continúa con la tecnología del petróleo. Se calcula que, si el gobierno chino decidiera brindara sus habitantes un nivel de vida similar al del americano promedio, el consumo de petróleo mundial aumentaría 50% de un año a otro, con lo que la crisis sería... ayer. Japón, que en recesión ya lleva unos quince años, y con un aumento del desempleo que los cálculos estatales han subestimado, no podría recuperarse demasiado en un horizonte visible y mucho menos de forma sostenida, dado que las presentes condiciones del mercado energético mundial así lo impondrían. Por lo tanto, Japón seguiría en el mediano plazo generando nuevos desempleados, En cuanto a Europa, lejos de pensar en la posibilidad de reducir tasas de desempleo, en algunos casos superiores a 10%, debería conformarse, en el mejor de los casos, con mantener estos niveles y crecer lo que se pueda, sí es que se puede. Frente a este panorama, esa actitud invasiva hacia los países que tienen petróleo, y a la vez despreocupada de reducir los niveles de consumo excesivo, por parte del gobierno que encabeza Bush, puede abrir todo tipo de dudas y presunciones acerca de qué intenciones hay detrás de su accionar y de su discurso, que no van por el mismo carril.

Es necesario pensar que la serie de crisis que han vívido muchos países en vías de desarrollo en los años '90 —México, sudeste asiático) Corea del Sur, Brasil, Turquía y la Argentina— es, en realidad, funcional a la situación energética mundial y al interés del establishment petrolero anglonorteamericano, debido a que las brutales reducciones evidenciadas en el nivel de vida de estos países tras sus respectivas crisis no generan otra cosa que un menor consumo de energía per cápita y, por lo tanto, facilitan que sea posible continuar con la era de los hidrocarburos fósiles. Es de esperar entonces que de aquí en adelante, mientras no haya cambios sustanciales en el manejo del poder en Estados Unidos, no haya ningún apuro por parte del gobierno norteamericano para rescatar países en bancarrota. Más aún, es posible que la élite banquera petrolera intente, a fin de continuar con la tecnología energética que le permite concentrar el poder, resolver el problema induciendo una baja en el consumo de energía per cápita. Ello se lograría, en el caso de países del tercer Mundo, con cada crisis económica o financiera que sobreviene en alguno de sus miembros más importantes. incluso esta baja en el consumo per cápita de energía sería aún mas pronunciada si incluso vastas áreas del Primer Mundo las padecieran (ejemplo, la prolongada crisis económica japonesa), a fin de acomodar la demanda de petróleo al declinante período productivo del mismo que en breve sobrevendría en el planeta.

Si se lo mira desde esta perspectiva, los supuestos "errores" de apreciación del Fondo Monetario Internacional, que contribuyeron a que se gesten y perduren muchas de las crisis de los últimos años, en realidad no fueron tales, sino que han sido funcionales a esta necesidad de reducir el consumo de energía per cápita, que bajo determinadas condiciones puede convertirse directamente en una necesidad de ir comenzando a reducir la cantidad de "cápitas".

jueves, 8 de agosto de 2013

Loquemeimagino Podcast N° 18, Lo Correcto

Podcast 18.

Podcast de lo correcto o al menos de lo que nos han hecho creer que es lo correcto (desde mi muy pendeja perspectiva).

Podcast que seguramente no le gustara a muchos.

Si no estás dispuesto a soportar ideas diferentes a las que te han enseñado mejor no lo escuches, si aun asi lo escuchas, las mentadas de madre son bienvenidas a loquemeimagino@hotmail.com

Gracias por escuchar


domingo, 23 de junio de 2013

Distractores.

"1a táctica de distracción de Chomsky, La estrategia de la distracción: El elemento primordial del control social es la estrategia de la distracción que consiste en desviar la atención del público de los problemas importantes y de los cambios decididos por las élites políticas y económicas, mediante la técnica del diluvio o inundación de continuas distracciones y de informaciones insignificantes. La estrategia de la distracción es igualmente indispensable para impedir al público interesarse por los conocimientos esenciales, en el área de la ciencia, la economía, la psicología, la neurobiología y la cibernética. ”Mantener la Atención del público distraída, lejos de los verdaderos problemas sociales, cautivada por temas sin importancia real. Mantener al público ocupado, ocupado, ocupado, sin ningún tiempo para pensar; de vuelta a granja como los otros animales."


Cuando hablamos de distractores casi siempre se nos viene a la cabeza la televisión, el distractor, evasor y manipulador por excelencia, la Television efectivamente cumple esas funciones, masifica ideas, productos, tendencias y un sin fin de sub-productos distractores como las telenovelas, el odiado fútbol (odiado por las Hordas de seres despiertos y no manipulados, es decir la clase intelectualoide), Los noticieros vendidos, los programas del corazón, programas tipo talk show como Laura en América y cosas de la vida, en fin.. Un sin número de programas que en su mayoría solo intentan entretener a los espectadores sin que estos tengan que razonar el contenido.

Miles de personas que no comparten estos gustos "culturales" Desdeñan dichos contenidos supuestamente por que al "evadirte" con este tipo de distractores dejas de contribuir de manera efectiva con tu sociedad, dicen que votas mal porque estas apendejado y manipulado, como si ya el simple hecho de votar no dijera exactamente lo mismo, pero, bueno….

Dicen que no protestas contra los actos abusivos del estado por estar distraído con las pendejadas que te regala la televisión, como si las protestas populares nos exhibieran un derroche de intelectualidad sobrenatural por parte de sus participantes, y sobre todo, como si una protesta fuera suficiente como para lograr cambiar el proceder de un estado.

Se dice que la parálisis social es por culpa de los pendejos que ven televisión y no se informan, y como consecuencia de su apatía arrastran a toda una sociedad a sufrir los abusos del gobierno (ponemos gobierno y no clase poderosa porque la gente "despierta" cree que son lo mismo).. ¿Demasiada carga social solo por ver el América - Guadalajara, no?.

En fin.. Creemos que si la gente no prendiera la televisión no tendría distractores y vería todo muy claro.. Chale, afirmación hecha por gente que no ve claro con todo y que no ve televisión.

¿La televisión y sus subproductos son distractores, evasores o ambos?, ¿Y qué pasa cuando estos distractores-evasores se convierten en distractores-evasores del distractor principal?.. ¿No crees que exista un distractor principal?, ¿Como le llamas entonces a las cosas que requieres para sobrevivir en este sistema?, ¿Como le llamarías a estos requerimientos cuando están tan lejanos y tienes pocos medios para acercarte a ellos?, ¿No serian distractores?, ¿no sería el distractor principal?.

Hablemos claro.. De verdad esperas que una persona que utiliza entre 12 y 14 horas en realizar su actividad productiva,(entre traslados y actividades), que el salario que percibe por esta actividad no le permite solventar las necesidades básicas de él, sus 3 hijos y su esposa (pero que pendejo inconsciente, como se le ocurre a un pobre copular y reproducirse, eso solo es para la gente que ha logrado los recursos suficientes para hacerlo) < fascista style>, que tiene problemas con sus hijos (aparte de pobre pendejo, si no puede educar que no tenga hijos), que tiene problemas con su esposa (mta, de verdad es un pendejo, ni tener contenta a la esposa puede), Que tiene problemas en su trabajo (ha de ser por huevon y pendejo), que como consecuencia de sus problemas laborales y su bajo salario detesta su trabajo (pretextos, pinche huevon), que tiene pedos existenciales por que su vida no resulto como él la esperaba (consecuencia de ser tan pendejo), ¿Neta esperas que al llegar a su hogar saque la enciclopedia británica y se ponga a acrecentar su cultura general?, ¿neta esperas que se ponga su bata y sus sandalias y se ponga a leer la jornada para informarse da la vida nacional y de los sucesos internacionales que “trasforman al mundo”?, ¿de verdad esperas que se ponga a meditar por horas la raíz filosófica, psicológica y social de todos sus problemas?, Neta, ¿crees que tenga ganas?, neta, ¿crees que tenga tiempo?, apelando un poco a tu inteligencia,. ¿Qué crees que sea lo primero que va a hacer al llegar a su casa?, analizando todo este contexto,. ¿De verdad crees que para el individuo en cuestión la televisión es un distractor para que no vea como se lo van a chingar?... según yo,. Podrá ser un evasor, no un distractor, el verdadero distractor en su caso es la vida diaria, el verdadero distractor es el estilo de vida actual, porque, todo eso no solo se aplica a los que no tienen lo suficiente, también se aplica a los que quieren tener más, y se obsesionan con su trabajo y con las cosas que “necesitan” conseguir, o que el sistema les ha hecho creer que necesitan para ser “mejores”.

Hay cosas más grandes que la televisión o el futbol distrayéndonos de los verdaderos problemas, ¿cuál es el verdadero problema?, ¿qué te suban la gasolina o el creer que el actual sistema basado en el consumo de hidrocarburos es el correcto?, ¿cuál es el verdadero problema?, ¿las medidas neoliberales que adoptan actualmente los gobiernos o el haberle dado un valor monetario a todo lo que existe o existirá?, ¿Cual es el verdadero problema?, ¿que no te guste tu trabajo o que se nos haya engañado con respecto a lo que podemos y debemos hacer solo por solapar el interés económico de un grupo privilegiado?.

Evadidos.. Todos

Distraídos.. Todos

Apendejados.. Todos

Utilizados... Todos

Al final, lo único que a mí me queda claro es que: “El distractor más grande es el sistema”.


miércoles, 29 de mayo de 2013

Loquemeimagino Podcast N° 17, Ciencia e Historia Oficiales

¡¡¡¡¡ Por fin terminamos !!!!

Por fin, aquí está el N° 17 del podcast, un capitulo muy complicado, no por su elaboración, sino por la falta de tiempo,. Casi dos meses para terminarlo, pero al fin lo hicimos,.

Complicado también por el madral de opiniones que emitimos con las que muchos no estarán de acuerdo,. (Se aceptan unfollows, ni modo)

En fin mil gracias por seguir escuchando, y si tu eres de los que comentan, un millón de gracias por eso..


DESCARGA DIRECTA:





Ó escuchalo aquí:


viernes, 10 de mayo de 2013

Enciclopedia Britanica, Inc.

Y bien,.. ¿En quién creer?, ¿qué institución nos garantiza una visión más o menos objetiva de los hechos?, ya no digamos la verdad, la verdad parece ser inalcanzable al menos para nosotros, simples mortales sin influencias ni poder.

Pasamos la vida “aprendiendo” de historia oficial escrita y publicada por el poder, de historia oficial manipulada, comprada y utilizada por ellos mismos, utilizada para guiarnos hacia donde es conveniente que estemos, hacia donde no hagamos daño o no podamos ver con claridad, nos dicen quien es el villano o quién es el héroe de acuerdo a lo que necesitan que sepamos, hoy la verdad es una, mañana será una muy distinta.

Ya hablamos de Harvard, una institución venerada y admirada por millones, un icono de la educación y la cultura alrededor del mundo, valoración que mas bien parece ser sobre valoración, tomando en cuenta el origen de sus fundadores, socios, accionistas y donadores,.. tomando en cuenta también el destino y función de la mayoría de sus egresados.

Ahora le toca el turno a la “fuente” por excelencia, a una de las instituciones del saber con más credibilidad y reconocimiento en los círculos académicos y culturales mundiales,.. Hoy le toca el turno a la “grandiosa” Enciclopedia Británica ó Enciclopedia Británica, Inc. a partir de 1964, para eso nos apoyamos en un texto que encontré en la pagina http://www.trinityatierra.com/ , y si, ya sé que muchos dudaran de una página cuyo nombre hace referencia al personaje de una película de ciencia ficción, pero el caso es que el libro escrito por Joseph McCabe, “Mentiras y Falacias de la Encyclopedia Britannica” existe (ahí les dejo el link hacia el libro on line en ingles por si quieren checarlo), el libro existe, fue publicado en 1947 y por la forma en que narra los cambios en las nuevas ediciones de la Enciclopedia Británica, me recordó a la narración de las “mejoras” en las nuevas ediciones en el diccionario de la neo lengua descritas en el 1984 de Orwell, escrito, casualmente en el año 1948, es decir un año después de la publicación del libro usado como base para este texto, Es decir “Mentiras y Falacias de la Encyclopedia Britannica” libro muy difícil de encontrar en formato físico, no creo que esta dificultad sea porque que afecte los intereses de algún grupo o individuo, no creo, eso es poco probable en un mundo tan abierto y democrático como el nuestro,.. (Nótese el sarcasmo).

En fin,.. Les dejo el artículo que encontré, el link que los lleva hacia el libro está allá arriba, así como el link que los lleva hacia la biografía del autor, mil gracias por leer,..





Cuando realizaba sus investigaciones, Joseph McCabe encontró, cabe decir que por casualidad, entre otras muchas cosas, que la venerable Encyclopedia Britannica había sido castrada al convertirse en propiedad del sindicato Rockefeller.

Alrededor del año 1900, los Rockefeller se convirtieron en propietarios de la Universidad de Chicago (Universidad jesuita) y por aquel entonces adquirieron los derechos de propiedad sobre la famosa Encyclopedia Britannica. Los editores de la universidad tuvieron que realizar el trabajo de eliminar la historia REAL del papado de Roma, así como los artículos que exponían la práctica MORTAL de la vacunación.

Joseph McCabe escribió cientos de libros. Muchos de ellos publicados por Julius-Haldeman en Kansas. Durante la Segunda Guerra Mundial, el FBI (Bureau Federal de la Inquisición) hizo una visita a este editor para que dejara de publicar libros escritos por Mc Cabe. Algunos de esos libros fueron prohibidos o se impidió que se editaran en su propio país.

En 1947 fue publicado en Kansas un libro escrito por McCabe titulado “Mentiras y Falacias de la Encyclopedia Britannica: de cómo fuerzas clericales poderosas y sin pudor castraron una famosa obra de referencia”.

ENTREGA Nº 1
Las Mentiras y falacias de la Enciclopedia Británica
COMO FUERZAS PODEROSAS Y DEL CLERIGO CASTRARON UN FAMOSO TRABAJO DE REFERENCIA
Por:Joseph McCabe

LOS EUNUCOS DEL PAPA
Hace algunos años tuve ocasión de referirme en uno de mis libros a los sopranos masculinos de la capilla papal en Roma. Estos hombres castrados, sexualmente mutilados, como lo sabía cada sacerdote o italiano, ya que los sopranos del coro de la Capilla Sixtina, eran la diversión de Roma, pero también se convirtió en un grave escándalo para los católicos norteamericanos y británicos que comenzaron a llegar a mediados del siglo XIX. Uno de los vicios que los españoles llevaron a Italia en el siglo XXVI a parte de la familia Borgia y los emperadores romanos españoles, fue el cantante de falsetto. Habían artistas que podían cantar falsetto con distinción, pero a medida que la ópera ganaba popularidad en Italia, comenzó la práctica de castración de jóvenes con buenas voces para convertirlos en “sopranos masculinos”, o como los Italianos los llamaban: Los castrados.

Estaban presentes en en cada ópera del siglo XVIII, pero los visitantes extranjeros nunca los aceptaron. El famoso semanario inglés, The Spectator, escribió acerca de cómo el “chillón gimoteo de los eunucos celestiales,” a finales del siglo XVIII comenzaron a desaparecer de las casas de ópera.

Pero, como indica la propia palabra “celestial”, los castrados podían verse en el coro de todas las Iglesias que se enorgullecían de su música, particularmente la capilla del Palacio del Vaticano. La Capilla Sixtina es uno de los mayores templos del arte, así como también de virtud y piedad en Roma. La iglesia se aferraba a sus eunucos cuando la opinión pública los quería desterrados de los escenarios de la ópera. El argumento de la Iglesia a favor de los eunocos era que estaba considerado una falta de delicadeza, o riesgo de ello, tener hembras en el coro de una iglesia (por aquello del celibato de los hombres), de manera que los sacerdotes optaron por ignorar la naturaleza “indelicada” de la operación de castración de los varones cantores. Este hecho era tan bien conocido por todos como el celibato del clero.

“El diccionario de Música y Músicos” de Grovels (1927) dice en una sección titulada “Castrati (Castrados)”:
“Los eunucos estaban de moda como cantores hasta hace relativamente poco tiempo; eran empleados en todos los coros de Roma.”
Tanto el diccionario Macmillan’s como todos los principales diccionarios de música, así como los escritores ingleses y estadounidenses que visitaban Roma antes de 1870 rara vez dejaban de mencionar, con humor negro o ceño fruncido, cómo la música hermosa del coro papal se debía, en grande parte, a los sopranni (sopranos) fabricados. En los últimos años del siglo XIX yo mismo hablé con ancianos, quienes por curiosidad, habían, cenado o almorzado con estos singulares sirvientes de Dios.

Un lector estadounidense me escribió afirmando que un amigo católico le había, como es usual, consultado este asunto a su pastor, y éste, con indignación, le había negado todas los hechos. Como autoridad fácilmente accesible, confiable sobre tal punto, yo le referí a la Enciclopedia Británica para que pudiera consultarla sobre este particular sobre el que no me cabía ninguna duda.
En todas las ediciones de la Enciclopedia anteriores a 1928 el artículo sobre “Eunucos,” después de mencionar la bárbara costumbre africana de hacer eunucos para los harenes, decía:

“Aun más vil, al ser practicada por una Nación Europea civilizada, era la práctica Italiana de castrar a los muchachos jóvenes para impedir el desarrollo natural de la voz, a fin de entrenarlos como adultos cantores soprano, tal como anteriormente se encontraban en La Capilla Sixtina. Aunque tal mutilación es un crimen penable con severidad, el abastecimiento de sopranni nunca faltó mientras estas facultades musicales tuvieron gran demanda. Eliminados desde hace muchos años del teatro Italiano por el disgusto de la opinión pública, ellos fueron la gloria musical y la vergüenza moral del coro papal hasta la ascenso del Papa Leo XII, uno de cuyos primeros actos fue liberarse de los eunucos.”

Mi corresponsal contestó, para mi asombro, que no existía tal pasaje en la Britannica, y fue entonces cuando comencé la investigación de la que doy cuenta en este documento.

Inmediatamente encontré que en la 14º edición, publicada en 1929, el pasaje se había mutilado escandalosamente; se habían suprimido todos los hechos sobre los coros de la iglesia, y se le daba al lector una impresión enteramente falsa respecto de la obra de de Leon XII. En esta nueva edición la totalidad del pasaje arriba mencionado había sido eliminado y reemplazado por este otro:

“La práctica Italiana de castrar muchachos a fin de entrenarlos como cantores adultos sopranos terminaron con la ascensión del Papa Leon XIII.”

Se le da así a entender al lector que el celoso Papa encontraba esta práctica de las casas de ópera, vergonzosa – y que por ello, la prohibió. No se decía ni una palabra sobre el hecho, en particular, de que la Iglesia de Roma, hasta el año 1878, no solamente permitía esta grotesca mutilación, sino que la requería para los propósitos de su capilla más sagrada. El texto referente a que el Papa Pío IX, el primer Papa en ser declarado infalible por la Iglesia, el único Papa “moderno” para quien la primera etapa oficial de la canonización se exigió, sentado solemnemente sobre su trono en la Capilla Sixtina durante 20 años había escuchado “el chillón gimoteo de sus eunucos celestiales” se había también suprimido deliberadamente. Esos hechos eran tan claramente inconsecuentes con las afirmaciones de los escritores católicos en Norteamérica que la supresión no podía ser otra cosa que debida a la influencia clerical. Entonces comencé a preguntarme por el sistema que se había utilizado para esta burda censura.

La Enciclopedia es, como su nombre imdica, una antigua institución Británica inspirada por la gran Enciclopedia Francesa del siglo XVIII.

A medida que aumentaba el público lector estadounidense, la Encyclopedia serviría a ambos países, y en 1920, como consecuencia de las necesidades especiales de los lectores estadounidenses y del gran desarrollo de la ciencia y tecnología, se hizo necesaria la preparación de una reedición completa. Ahora se podían contar con personal adecuado y una editora estadounidense y otra británica. Además prestaban servicio al Rey Jorge y al Presidente Hoover.

Fue entonces cuando el último rastro del idealismo de sus primeros editores desapareció. Qué se llevaran a cabo negociaciones secretamente para asegurar una gran circulación no lo podemos saber a ciencia cierta pero cuando el trabajo se completó en 1928, la Confederación Católica Westminster, que corresponde a la organización Católica de Bienestar en Estados Unidos, emitió el siguiente comunicado en su informe anual:

“La revisión de la Enciclopedia Británica se emprendió con una visión para eliminar material que fuese objetable desde el punto de vista católico y para insertar lo qué era preciso y no sesgado. La totalidad de los 28 volúmenes se examinaron, se anotaron las partes objetables, y se proporcionaron las razones para su eliminación o enmienda. Hay razón para esperar que la nueva edición de la Británica sea mucho más precisa e imparcial que sus predecesoras.”

CASTRANDO LA ENCICLOPEDIA

Otro ejemplo de eliminación y sesgo puede encontrarse en el primer volumen sobre las notas de los Papas Adriano I y Adriano II. Adriano era el Papa en tiempos de Carlomagno, y los historiadores saben que el emperador llegó, como se muestra en sus cartas, a despreciar al Papa y lo desafió sobre un punto de su doctrina porque entonces el empleo y la veneración de estatuas en las iglesias se había convertido en un conflicto doctrinal entre Oriente y Occidente.

La nota sobre Adriano, en la edición más antigua de la Enciclopedia, era uno de esos párrafos inexpertos hechos por algún autor que no tenía conciencia sobre la importancia de esta reyerta histórica, pero la mano de un sacerdote había insertado la siguiente imprecisión en la nueva edición:

“Las relaciones amistosas entre el Papa y el Emperador se vieron perturbadas por las diferencias entre ellos sobre la cuestión de veneración de imágenes.”

Aquí, en vez de abreviar, el editor gratuitamente insertaba material nuevo y falso.

“El Papa, cuya seguridad dependía del favor de Carlomagno, en realidad casi no se pronunció, pero en un tiempo cuando “la veneración de imágenes”, que los historiadores persisten en llamar estatuas, se encontraban en el punto más álgido en la Iglesia, Carlomagno realizó actos que la práctica y la teoría romana denunciaban como pecados y las tímidas protestas del Papa fueron desdeñosamente ignoradas”.

Encontramos un procedimiento diferente con relación al Papa “Albano.” La edición antigua dice que él es comúnmente definido como “el protomártir de Bretaña,” y agrega:

”pero es imposible determinar con certeza si realmente existió, ya que no hay ninguna mención suya hasta mediados del siglo VI”.
Lo cual es correcto. Pero estos entusiastas de la corrección de fechas y de la rectitud, en la nueva edición, lo convirtieron en un santo verdadero, indisputable y mártir. El se había convertido, por obra y gracia de la Nueva Edición, en “el primer mártir Bretaña” y todos los indicios y referencias sobre dudas respecto a su existencia se han eliminado.

Ahora pasamos a “Alberto Magnus”: Primeramente, no se explica cómo una Enciclopedia en inglés no dice “Albert the Great” (Alberto el Grande); posiblemente esto se debe a que el epíteto es menos ofensivo al ojo en latín y este artículo se condensó (como toda la nueva edición) de una manera peculiarmente clerical.

El escritor original no informaba adecuadamente al lector, por ejemplo, de que Alberto era tan adepto a la obra científica de Aristóteles, que los católicos de su época le llamaban “El Mono de Aristóteles” y que sus desaciertos en materia de conocimiento llegaban a tal grado, que llamaba a Platón “el Estoico” (cuando Platón vivió un siglo antes de que se fundara la escuela estoica). Todos estos datos se eliminan por la sagrada causa de la brevedad pero se insertan nuevos cumplidos a Alberto, tales como que Alberto era llamado “el más destacado de los filósofos cristianos”, con lo cual se rellenaban los huecos dejados por tanta eliminación.

El artículo sobre los “Albigenses” es uno en que un estudiante moderno seguramente espera de una enciclopedia moderna que reemplace el artículo viejo convencional por uno en conformidad con nuestro conocimiento histórico actual. En lugar de esto vemos un artículo de una página, reducido a la mitad de la página, lo cual se hizo principalmente eliminando 25 líneas en las que el escritor antiguo había explicado honestamente que el Papa envió a los brutales Caballeros de Francia contra los Albigenses tras 20 años de predicamento de la doctrina del Papa que habían fracasado sin dejar la menor huella sobre ellos. Ahora quedaban 10 líneas donde se leía apenas que ” las indagatorias extensas” de la Inquisición todavía se aplicaban después de años de matanza por los salvajes cruzados del Papa. Hoy en día se conoce la importancia desde el punto de vista de la historia de esta brillante, aunque no cristiana, civilización en el Sur de Francia (cerca de La España Árabe) y qué Europa perdió para siempre. De la brutalidad de la matanza y la deshonestidad del Papa en llevarla a cabo no se le da al lector el menor dato, aunque toda la información se encuentra y puede leerse en las cartas existentes aun hoy del Papa.

Con el Papa Alexander l lo que los retocadores del clero principalmente hicieron fue eliminar las frases con las que el anterior escritor le hacía conocer al lector correctamente, aunque con un estilo informal y casual , que “tal Papa fue posible solamente por el hecho de que La iglesia de entonces estaba extraordinariamente corrupta”. El admite, por ejemplo, que Alexander se corrompió notoriamente, como cardenal, cuando fue electo Papa: “Aunque la corrupción eclesiástica estaba entonces en su máximo apogeo, su modo notorio de vida le causó una reprensión muy severa del Papa Pio II.” Esto es por supuesto un corte sesgado, aunque todavía existe la carta en la que el Papa describe la vida escandalosa del cardenal. También se cortó (para ganar brevedad) este pasaje:

“Un ejemplo característico de la corrupción de la corte papal es el hecho que la hija de Borgia, Lucrecia, vivió con una de sus damas Giulia, quien le crió una hija, Laura, en 1492 (el año de su consagración como Papa).”

En suma, mientras la mención a las damas de Alexander y al hijo producto de su relación en el artículo de la 11º edición, eran correctos, se manipuló de tal manera que el lector no tiene ninguna idea que el cardenal no había dejado su conducta corrupta en el momento de su elección como Papa.

Pasemos al artículo sobre Antonelli. Este hombre era el Cardenal Secretario de Estado del Papa Gregorio XVI y Pío IX, quien se tiene como santo por los católicos estadounidenses. El era el hijo de un humilde cortador de madera y murió millonario: dejó $20,000,000, una hija bastarda y una condesa peleando contra sus parientes ávidos del dinero. Había rehusado tomar las órdenes sacerdotales por su afán de libertad. Su concupiscencia, liviandad y su completa indiferencia a las viles condiciones de los estados papales eran conocidas por todos.

En la 11º edición leemos sobre él: “A la muerte de Antonelli las finanzas del Vaticano no se encontraban en orden, con un déficit de 45,000,000 liras. Su fortuna personal, acumulada durante su ejercicio, era considerable y se legó casi enteramente a su familia. Su actividad se dirigió casi exclusivamente a la pugna entre el Papado y el resurgimiento italiano”. La historia real sobre la influencia ejercida por su inescrupulosa malversación y su siniestra personalidad se desdeña totalmente.

Más divertida es la manipulación de la nota de “Arthur” (Arturo) de Bretaña. Antes de la edición 11º se presentaba a Arturo al lector como un mito, como la concepción popular así lo afirma. Todo lo que podíamos afirmar con certeza, basándonos en anteriores ediciones, es que allí parece haber existido un capitán de nombre Arturo en el andrajoso servicio militar de uno de los reyes británicos semicivilizados que ascendieron al poder después de la salida de los romanos. Sin embargo, en este nuevo compendio del conocimiento moderno (ahora patrocinado por la Universidad de Chicago) Arturo se ha convertido en una realidad indiscutible y altamente respetable; “el Rey de Bretaña” quien condujo sus ejércitos cristianos contra los anglosajones paganos. Y esto se afirma bajo la autoridad de un monje que escribió ¡dos siglos y medio después de los hechos!.

En el artículo sobre “Giordano Bruno,” de la 11º edición casi se puede percibir la furia con que las tres columnas se reducen a menos de una columna en la 14º edición, y esto se hizo cortando casi 100 líneas de sobria apreciación del gran ex – monje y erudito. Pero el corte no fue suficiente. Un nuevo párrafo informa el lector inocente: “Aparte de su naturaleza despectiva, y su ataque a la cristiandad contemporánea, la principal causa de la caída de Bruno fueron su rechazo de la astronomía aristotélica y la aceptación de la de Copérnico … y sus tendencias panteístas.”

La indiscutible verdad es que fue quemado vivo por el Papado, que llegó a un corrupto acuerdo con los venecianos a fin de apresarlo y satisfacer su amargo odio por el crítico.

“Buda y el Budismo”‘ se mutilan en la nueva edición de una manera extraordinaria. Doce páginas de útil material, se quedan reducidos a tres; como si el Budismo hubiese muerto en Oriente y los occidentales hubieran perdido cualquier interés en la materia. Entre las publicaciones de las anteriores ediciones de la Enciclopedia se había escrito una gran cantidad de material sobre el credo de Buda, y es que, de acuerdo general entre expertos en religión y expertos en la India, Buda era Ateo. No se menciona ni una palabra de este hecho, y el lector es dejado a merced del panfletista que habla del ” genio religioso” del hombre.

En el artículo “historia de Iglesia,” hay ligeros cambios a lo largo de todo el artículo, comparado con el anterior artículo de ediciones anteriores. Veamos la lista de Papas que adoptaron el nombre de Clemente. Al lector no se le informa de que muchos historiadores rehúsan admitir a “Clemente I” como el primero de los Papas porque éste no es mencionado en la Carta de los Romanos a los Corintios del año 96 D.C. La historia de muchos otros “Clementes”, de reputación notoriamente enlodada, se retocó discretamente. Clemente V, un aventurero francés, quien se vendió a sí mismo al Rey Francés en condiciones soeces a fin de conseguir un Papado, recibe en la Nueva Edición las siguientes palabras “en la prosecución del deseo del rey él convocó el Consejo de Viena” (para enjuiciar los vicios monstruosos de su predecesor y los todavía más escandalosos de los Caballeros del Templo) y sólo se dice: “Temiendo que el estado procediera independientemente contra las herejías alegadas, él convocó al Consejo de Viena”; de este modo, introduce esta breve nota y no informa al lector absolutamente nada sobre el carácter del Papa.

DOMANDO LA HISTORIA

En el artículo de 20 páginas sobre la palabra “Crimen” no conseguimos ninguna información estadística en relación a los crímenes relacionados con educación religiosa.

Veamos el artículo de las “Cruzadas.” Nuevamente el artículo en la Enciclopedia es tan devoto e impreciso que no podría ser mejorado. Admite que Europa se había vuelto más bien agresiva debido a las invasiones bárbaras pero sostiene que esto alimentó a la Iglesia con la fuerza grandiosa del Caballero para emplearse contra el Musulmán malvado:

”La institución de caballería representa una consagración clerical, para fines ideales y propósitos nobles, el impulso marcial del que la Iglesia se había empeñado en apoyarse….”.

Y todo por el estilo. Una mentira en cada sílaba. En realidad, los caballeros de Europa eran, con raras excepciones, brutos eróticos, sus damas igualmente, como todos los historiadores con autoridad así describen. El Papa, sus palabras se conservan en archivos históricos, observó el saqueo del altamente civilizado Oriente ante sus ojos al convocar la primera Cruzada; y la historia, casi de cabo a rabo, es una mezcla de superstición, concupiscencia, y salvajismo.

Sobre el Papa “San” Damaso I en la nueva gran enciclopedia de él se conoce que fue un inescrupuloso aventurero español y, como los sacerdotes contemporáneos le llamaban, “calentador de orejas de matronas.” Los comentarios y referencias en el corto artículo de la 11º edición sobre las matanzas increíbles que se llevaron a cabo durante su elección y su posterior acusación (por adulterio) en la corte civil se eliminaron completamente.

Veamos el corto artículo sobre la “Edad Media,” no hay ningún artículo en la edición 11º de la Enciclopedia sobre el tema, entonces a un oscuro profesor de tercera clase de una Universidad Británica se le encargó escribir uno. El autor afirma, “anteriormente usada para cubrir el período entero entre el fin de la civilización clásica y el renacimiento del conocimiento en la siglo XV.” Ningún historiador la extiende más allá de fines del siglo XI. En resumen, el autor copia a ciertos profesores estadounidenses de tendencia católica y que no proveen ninguna evidencia de que incluso puedan leer literatura medieval. El período de la Edad Media es oscuro “debido a la insuficiencia de evidencia histórica” aún así “un gran trabajo intelectual se hizo en condiciones desfavorables.” Hoy en día nadie puede leer un libro escrito entre 420 y 1100 D.C.; no es por esto que se denomino “edad oscura”. El escritor ni siquiera sabe que fue el Cardenal Baronio, “el Padre de Historia Católica,” fue quien acuñó la frase.

Peor aún, desde el punto de vista histórico, es el artículo sobre “La democracia.” Se dice en la Nueva Edición que ” no había lugar” para la idea de democracia en la Edad Media,” pero “la Cristiandad con su doctrina de hermandad y su sentido de amor y compasión había introducido una idea desconocida al mundo pagano, la idea de la dignidad e importancia inherente al hombre .” Ahí podemos observar de nuevo este volcado de sermón salido de la pluma de un sacerdote en una enciclopedia moderna. Lo qué es peor, el escritor oculta, o ignora, que cuando la aspiración democrática apareció en Italia, fue el Papado quien se dedicó con más ahínco a pelearla truculentamente durante dos siglos.

Analicemos el artículo de “Galileo”. Ya en la 11º edición, el artículo había sido escrito por un astrónomo católico, el artículo se cortó de cinco páginas a dos (mientras se dedicaban 16 páginas al fútbol en la Encyclopedia). No se modifica el hecho de que en la primera condena de Galileo se le ordenó que no escribiese más sobre el tema y “él prometió obedecer”, dato que está plagado de dudas y se basa en pobres evidencias históricas. Ambos escritores católicos rehusaron escribir y anotar la frase real e histórica de la condena de Galileo, en la que la Iglesia Romana aba cuenta de su posición sobre el asunto que era que constituía una “herejía formal” afirmar que la Tierra giraba alrededor del sol.

El artículo “Herejía” de la edición antigua, sufrió el usual proceso discriminatorio de reducción. El escritor en la anterior edición había escrito: “Mientras la Iglesia cristiana era perseguida por el imperio pagano, ésta abogó por la libertad de conciencia, pero casi inmediatamente después de que el cristianismo se adoptara como la religión oficial del Imperio Romano comenzó la persecución de los hombres por sus creencias religiosas.”

Este párrafo se eliminó, por supuesto. Posteriormente se suprimió una larga lista de otras persecuciones católicas llevadas a cabo en la Edad Media y se reemplazó el artículo por esta frase excesivamente imprecisa:

“Las herejías de la Edad Media no eran meramente materias de doctrina (aunque importantes) sino que eran síntomas de movimientos espirituales comunes a gente de muchas tierras y de una manera u otra amenazaban el poder del sistema Católico Romano.”

Un artículo sobre el tema que francamente apunte a proveer los hechos al lector moderno habría mencionado por lo menos la pena de muerte que se imponía al culpable de herejía. Ni una palabra al respecto, aunque sobre el tema de la penalización de las opiniones religiosas todo esto es mencionado frecuentemente hoy en día.

El artículo referente a “Hospitales” es un espécimen del arte de la censura. Se divide en dos partes, historia y práctica moderna. En la sección histórica, no se observa ninguna modificación, pero sí en la sección de práctica moderna. ¿Fue debido a un error editorial o tipográfico? Veamos. El artículo antiguo da cuenta adecuada de las amplias provisiones para los enfermos en muchas civilizaciones precristianas, especialmente la Romana, y agrega:

“En la era Cristiana no se fundó ningún establecimiento para el alivio de enfermos hasta la época de Constantino.”

Podría haber agregado que aun entonces eran pocos y que se destinaron para separar al cristiano enfermo de los templos de Esculapio, que eran entonces los principales hospitales Romanos. Todo esto fue cortado y reemplazado por la siguiente declaración totalmente falsa y extraviada:

“Pero aunque no pueda sostenerse que los hospitales sean un resultado directo del cristianismo, sin duda la influencia humanista sobre ello fue importante, y con el crecer de la civilización, hombres y mujeres de muchas razas se percataron de que el tratamiento de enfermedades en edificios apartados exclusivamente para el cuidado de los enfermos era de hecho una necesidad en los distritos urbanos.”

Fin del resumen del libro.

Esto es un breve ejemplo de cómo una obra, de amplia difusión, una obra de referencia de programas escolares, de estudios universitarios, de cátedras y de artículos científicos, puede ser alterada de forma sesgada para falsear la visión de la realidad del mundo y de la historia.

Esto es un breve ejemplo de cómo una obra puede emplearse para el Control Mental de las Masas, modificando la percepción de la verdad, de los hechos históricos y de la Ciencia.

Aquí hay una lista breve de títulos de McCabe que merece la pena buscar, conseguir, leer y difundir.

Mentiras y falacias de la Encyclopedia Britannica (“The Lies and Fallacies of the Encyclopedia Britannica : how powerful and shameless clerical forces castrated a famous work of reference”). Haldeman-Julius, Girard, Kansas,1947

Historia de los Papas, Watts & Co., London, 1939. The History of the Popes

El Vaticano entierra la Ley Internacional, Haldeman-Julius, Girard, Kansas, 1941. The Vatican buries International Law

La Verdad sobre la Iglesia Católica, Haldeman-Julius, Girard, Kansas 1926.

El Mito de la Erudición Católica The Myth of Catholic Scholarship, Haldeman-Julius, Girard, Kansas,1950.

El papado en la política de Hoy, The Papacy in Politics Today, Watts & Co., London, 1951.

El martirio de Ferrer. The Martyrdom of Ferrer, Watts & Co., London, 1909.

Vida y Cartas de George Jacob Holyoake. Life and Letters of George Jacob Holyoake.

Estudio de Escritores Antiguos. Survey of Ancient Writers.

12 Años en un Monasterio. 12 Years in a Monastery.

History of the Jesuits.

El esplendor de la España Morisca. Splendor of Moorish Spain.

Ochenta años siendo Rebelde, Autobiografía. Eighty Years a Rebel, Autobiograph, Haldeman-Julius, Girard, Kansas,1947.

lunes, 8 de abril de 2013

Somos lo correcto

De donde emana nuestra supremacía como especie?, de donde nuestro dominio sobre el planeta?, no somos inteligentes, o al menos no todos, ni siquiera la mayoría, y sobre todo, no los que necesitaríamos que lo fueran, somos taaan promedio, o más bien, somos un promedio que no crea, que no propone, que no aporta.

Somos un promedio que imita, que copia, que sigue la tendencia, que se educa con las propuestas de la mente de otros, que hace suya la moral de un “ser confiable”, que hace suya la ética de alguien más, que concluye con la razón de otros, que repite como suyas las palabras de alguien más.

Somos un promedio, somos un estándar, somos lo que nos dicen “tenemos” que ser, somos lo “correcto” que alguien más nos deja ser, somos como “debemos” ser.

Somos lo “correcto” que impulsa el crecimiento de una nación, aunque dicho crecimiento se haya detenido hace mucho, ahora todo sea cuesta abajo y TU solo seas el residuo de esa materia prima que se uso para hacer crecer algo que alguien más devoró,. y ahora, solo seas una “sobra” incomoda, sin un lugar, sin un objetivo, una “sobra” entre un montón de “sobras”,.. Aun así, lo “correcto” sigue siendo lo “correcto”, y aun así, lo correcto no se debe cuestionar, a fin de cuentas, lo “correcto” no puede estar mal, ¿o sí?, ¿cómo podría estar mal, si es lo correcto?

Somos lo “correcto” que te impulsa a ser “mejor”, aunque al querer ser “mejor” de acuerdo a los parámetros establecidos, te involucres en una competencia en la que por fuerza habrá quien resulte ser “peor”, un “peor” solo según lo establecido, un “peor” solo según las reglas de la competencia, no importa si la competencia es desigual, no importa si la competencia es despiadada, no importa si la competencia es inmoral,. Nada importa,... YO… “soy mejor” y ser “mejor”,.. es lo “correcto”..

Somos lo “correcto” que respeta leyes y reglamentos creados para que lo “mejor” sea lo que “debe ser” según unos cuantos, y sobre todo, lo “mejor” sea lo “mejor” SOLO para unos cuantos,.. ¿lo “mejor” es lo “mejor” para todos SIEMPRE?,.. lo “mejor” para ti, podría resultar lo “peor” para alguien más, lo “mejor” para una nación podría resultar ser lo “peor” para otra,. Lo “mejor” para una corporación podría ser lo “peor” para todos, pero,.. ¿Eso qué importa?, respetar la ley, siempre es lo correcto, la ley es la ley.

Somos lo “correcto” que adopta la moral y la ética que alguien más determina, somos lo “éticamente correcto” que algún autor dijo teníamos que ser, somos lo “moralmente correcto” que algún intelectual nos permite,. Somos lo “correcto” sin una moral propia, somos lo “correcto” con la ética “correcta”.

Somos lo “correcto” que no crea, somos lo “correcto” que no aporta, somos lo “correcto” que no propone,.. Aun así,.. Somos lo “correcto”.

Somos lo “correcto” porque trabajamos incansablemente, aunque al hacerlo te quedes sin tiempo para ti mismo, aunque al hacerlo te quedes sin tiempo para pensar, aunque al hacerlo te quedes sin ganas de cuestionar,.. ¿Cuestionar qué?,.. No sé,. Tal vez,. Si lo “correcto” de verdad es lo “correcto”

Somos lo “correcto” que no crea, somos lo “correcto” que no aporta, somos lo “correcto” que no propone, somos lo “correcto” que no puede hacerlo, justo, por estar haciendo lo “correcto”.

Somos lo “correcto” que estudia como es “correcto”

Somos lo “correcto” que trabaja como es “correcto”

Somos lo “correcto” que cumple como es “correcto”

Somos lo “correcto” que vive como es “correcto”

Somos lo “correcto” que ama como es “correcto”

Somos lo “correcto” que educa como es “correcto”

Somos lo “correcto” que lee lo que es “correcto”

Somos lo “correcto” que crece según lo “correcto”

Somos lo “correcto” que piensa de la manera “correcta”

Somos lo “correcto” que imita a los modelos “correctos”

Somos lo “correcto” manipulado de la manera “correcta”

Somos lo “correcto” manipulando de la manera “correcta”

Somos la mayoría “correcta” construyendo día a día este mundo, este planeta, esta sociedad.

Somos la mayoría “correcta”, gracias a la cual, el mundo es lo que es hoy en día.

De verdad,.. ¿No sientes un poco de vergüenza por eso?